jueves, 20 de enero de 2011

¿Monogamia o fidelidad?


La vida y otras cosas... con un twist de limón


¡Hello, hello! El blog de esta semana tiene que ver con un tema que he platicado varias veces y con diferentes personas; tanto hombres como mujeres de diferentes edades y generaciones, y se trata sobre la monogamia, si existe, si es natural o si es tan sólo un invento de la sociedad.

Empiezo por definir la palabra monogamia según la Real Academia Española: [(Del lat. monogamĭa, y este del gr. μονογαμία). 1. f. Cualidad de monógamo. 2. f. Régimen familiar que veda la pluralidad de esposas]. Con base en esta definición, reitero mi opinión sobre la monogamia: el ser humano no es monógamo por naturaleza. ¿Por qué? Estamos hablando de "régimen familiar" y de "esposas", lo que automáticamente nos habla de un aspecto social y quizás hasta antropológico. ¿Pero qué pasa si lo analizamos desde el plano animal? Gente, somos animales y sí, hay muchas cosas que nos diferencian de ellos, pero finalmente somos animales y la cadena, para los que ya olvidaron sus clases de Biología, va así:

Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Mammalia
Orden: Primates
Familia: Hominidae
Tribu: Hominini
Género: Homo
Especie: Homo sapiens

Quiero mencionar que esta opinión viene de estar pensando en el ser humano como animal mamífero y cómo actúa instintivamente, por eso es que puse la cadena. Al compararnos con otros mamíferos como un perro, ¿qué sucede? El macho siempre está listo para pelear por las perras que sean necesarias y preñarlas cada que pueda. La hembra, por el otro lado, entra en celo aproximadamente dos veces al año y aceptará al macho que se vea más fuerte o con los mejores genes para mejorar la especie o por supervivencia, pero no se cruzará con el mismo perro si, al igual que el macho, ella tiene más o mejores opciones. El ser humano también tiene opciones. Si fuéramos naturalmente monógamos, nos casaríamos/reproduciríamos con nuestro primer novio/a... ajá... acuérdense y sientan cómo se les paran los pelitos de la nuca (aunque yo la neta no podría quejarme si hubiera sido así porque mi primer novio es una gran persona). Estaríamos toda la vida con esa persona y jamás habría alguien que nos tentara a siquiera tener un pensamiento sexoso. La realidad no es así, incluso cuando ya estamos con la persona que queremos "para toda la vida", los HOMBRES y las MUJERES siempre tendremos tentaciones y fantasías con otras personas. Entonces si esto nos sucede, ¿por qué la sociedad nos dice que tenemos que ser monógamos si es algo que va en contra de nuestra naturaleza como animales mamíferos que somos?

Si regresamos en el tiempo y nos vamos al imperio romano, no sólo era bien vista la poligamia, sino también la bisexualidad; que de hecho, era mejor aceptada entre hombres que entre mujeres. La sociedad aceptaba también la pedofilia... pero bueno, ése es otro tema y por muy romanos o lo que sean, yo nunca estaré de acuerdo con eso ni soy pro Calígula. El punto al que quiero llegar es que la monogamia o la poligamia no quieren decir que estén bien o estén mal, una u otra. Se dice que lo "normal" es lo que la mayoría de la gente hace, pero eso no quiere decir que sea lo mejor, ergo, que la monogamia sea normal. Para mí no lo es y con esto tampoco estoy sugiriendo ni recomendando la promiscuidad en ninguna de sus variantes, finalmente cada quien sus nalgas. Tan sólo estoy diciendo que nuestra naturaleza e instinto es polígamo, no monógamo, y creo que si podemos entendernos desde un punto de vista más animal, orgánico y genético además de social, podríamos salvar más parejas y matrimonios. Siempre he pensado que si actuamos más animales en algunas situaciones seremos mejores humanos.

El sabor de lo prohibido es excitante. Si te están diciendo que debes ser monógamo, el gusanito de ver qué hay afuera es más fuerte, pero si la constante no fuera así, estoy segura que no habría tantas tentaciones que pueden resultar en infidelidades, porque aquí entra lo que es la fidelidad. Monogamia no es lo mismo que fidelidad.

Con esto quiero terminar. Cuando uno está completamente feliz con su pareja, cuando se complementan, se llenan, se procuran, se respetan, se aman, se dan su espacio o cual sea la dinámica sana de cada pareja, hay fidelidad y el hecho de que no seamos monógamos no quiere decir que vayamos por la vida acostándonos con cuanta persona nos atraiga, para nada. Lo que quiero ofrecer es un punto de vista distinto. No somos monógamos, pero podemos ser fieles y ahí sí por decisión propia. Así que la próxima vez que vean a una chava o a un tipo que les mueva el tapete cañón y les haga tener sueños húmedos, recuerden que su pareja puede estar pasando por exactamente lo mismo... no la descuiden, escúchenla, procúrenla, cedan sin sacrificar, y si hay conflictos, vuelvan a ganársela porque uno nunca sabe si alguien más vivales puede acabar ganándosela.

¡Bendiciones!

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